
Sinopsis
Mortime «Mo» Folchart y su hija de 12 años, Meggie, comparten su pasión por los libros y un don: si leen en voz alta, pueden hacer aparecer a los personajes del libro. Pero un peligro acecha: por cada personaje de ficción que llegue al mundo real desaparecerá una persona, que se irá al mundo de ficción… Hace tiempo Mo compró un ejemplar de un libro muy buscado. Es Corazón de tinta, un libro repleto de ilustraciones y de extrañas y maléficas criaturas que, desde que su hija Meggie tenía tres años, conserva escondido. Fue entonces cuando, mientras lo leía en voz alta, su mujer desapareció en ese misterioso mundo de ficción. Capricornio, el villano de Corazón de Tinta, desea hacerse con ese ejemplar único para controlar el poder sobre la encarnación del mal: la Sombra. Para ello, secuestrará a nuestros héroes y los embarcará en un peligroso viaje…
Reseña
Su padre comenzó a alimentar el silencio con palabras. Las extraía de las páginas como si hubieran estado esperando su voz… Palabras largas y cortas, de nariz puntiaguda y blandas, palabras que ronroneaban y zureaban. Palabras que bailaban por la habitación, dibujaban imágenes cristalinas multicolores y cosquilleaban la piel.
Corazón de tinta está lleno de ese tipo de frases. Personalmente me ha gustado mucho encontrármelas, pero no estoy muy segura de que la novela en conjunto merezca tanto la pena como algunos de sus elementos aislados.
La cuestión es que la sinopsis es maravillosa, igual que el libro. Como lectora apasionada que se crió a la sombra de Bastian Baltasar Bux, me fascina la interrelación entre el mundo real y las historias de ficción. La historia interminable es el libro por excelencia cuando hablamos de fantasía que afecta a la realidad y de realidades que afectan a la fantasía. Cuando leí la contraportada de Corazón de tinta supuse que algo de eso encontraría. La premisa es una auténtica delicia: una familia capaz de sacar personajes de los libros ¿quién en su sano juicio no querría leer algo así?
El problema es que el libro no cumple lo que título y sinopsis prometen. O lo cumple, pero de una manera un tanto… confusa.
Se supone que Corazón de Tinta está dedicado a un público infantil y juvenil, pero que las personas adultas también pueden disfrutarlo. Tengo mis dudas respecto a todas estas cuestiones.
En primer lugar, el lenguaje, la manera de redactar y, sobre todo, los diálogos, pendulan entre lo más alambicado y lo infantil, con lo que me he pasado más de la mitad de las 500 páginas entrando y saliendo de la lectura.
En segundo lugar, la actitud de los personajes malvados es lo bastante aterradora para que las niñas no la disfruten y lo bastante naif para que las mujeres no se la tomen en serio.
En tercer lugar, lamentándolo mucho, no me he encontrado ninguna criatura extraña y maléfica, así que más decepción por ese lado.
La peripecia sí se ajusta al público más joven, pero pierde al más adulto. Los personajes no hacen más que ir y volver entre dos o tres escenarios. Toman decisiones que no pasan el filtro del sentido común más que si se piensa que la novela se dirige a un público muy joven que vaya a meterse de lleno en la aventura, sin cuestionar las acciones de los personajes. Un público en el que, por cierto, la propia novela no cree, pues presenta a una protagonista muy sensata. La lectora que jamás se tragaría lo que sucede en la novela que habita.
Pero le has puesto tres estrellas en Goodreads, Alicia…
Es cierto, se las he puesto. Y es que Corazón de tinta da en el clavo en algunas cuestiones que me parecen clave. No es un asco de novela, ni mucho menos. En mi opinión es una novela torpemente ejecutada que no mantiene la coherencia en cuanto al público al que va dirigida, pero he encontrado algunas cosas muy buenas.
Los personajes secundarios son estupendos
Mención especial para Dedo Polvoriento, que es el más ambiguo, el que tiene más luces y sombras y por tanto el más humano y mejor. Todos los demás son unidimensionales y planos. Sabes en todo momento qué van a hacer y casi qué van a decir.
Ellinor es mi punto flaco: me ha encantado. Se trata de una mujer muy rica que gasta toda su fortuna en comprar libros. Los ama, los adora y es el personaje que. Sin mostrar una gran riqueza emocional, se transforma de manera más evidente. Me ha gustado mucho que tenga tan mal humor y que sea una bocazas y que no esté dispuesta a aguantarse con el papel que le ha tocado. Ella tiene uno de los fragmentos que más me han gustado del libro.
Mira a tu hija —le susurró—. Valiente como… —Quiso comparar a Meggie con el héroe de alguna historia, pero todos los que le venían a la mente eran hombres, y además ninguno le parecía lo bastante arrojado para rivalizar con la niña que, tiesa como una vela, miraba orgullosa a los chaquetas negras de Capricornio.
Fenogglio también me parece un buen personaje, tratado con un gran sentido del humor. No sé hasta qué punto ese humor se perderá a ojos de los más pequeños, pero las escritoras entenderán muy bien todas las idas, venidas y veleidades de este señor.
La técnica con la que Funke nos ofrece la información es muy eficaz
Si conoces mi blog es probable que hayas leído alguno de los artículos que he escrito sobre cómo debe comenzar una novela. Así lo hace Corazón de Tinta:
Aquella noche llovía. Era una lluvia fina, murmuradora. Incluso años y años después, a Meggie le bastaba cerrar los ojos para oír sus dedos diminutos tamborileando contra el cristal. En algún lugar de la oscuridad ladraba un perro y Meggie no podía conciliar el sueño, por más vueltas que diera en la cama.
Guardaba debajo de la almohada el libro que había estado leyendo. La tapa presionaba su oreja, como si quisiera volver a atraparla entre las páginas impresas.
—Vaya, seguro que es comodísimo tener una cosa tan angulosa y dura debajo de la cabeza —le dijo su padre la primera vez que descubrió un libro debajo de su almohada—. Admítelo, por las noches te susurra su historia al oído.
—A veces —contestó Meggie—. Pero solo funciona con los niños pequeños. —Como premio Mo le pellizcó la nariz.
Mo. Meggie siempre había llamado así a su padre.
La manera de plantear este escenario, y la mayor parte de los que aparecen en la novela es sencilla pero evocadora, la lluvia murmuradora, las emociones del personaje, el amor a los libros y la relación de padre e hija quedan claros en estas pocas palabras. Claros y bien mostrados en lugar de contados. Una maravilla.
Si eres escritora y todo lo que he dicho antes te ha quitado las ganas de leer el libro, te invito a que recuperes esas ganas para aprender cómo Funke coloca la información.
Premio para la manera en la que Funke conduce la acción
Puede que la trama de Corazón de tinta no me haya cautivado, pero la manera en la que está hilada sí me parece muy buena. Cómo cada personaje es fiel a su personalidad, toma sus propias decisiones (por descabelladas que sean) sin tener en cuenta a los demás cuando no deben tenerlos en cuenta y la manera en la que todo confluye me parece muy meritoria. Que luego el clímax sea bastante anticlimático ya no me gusta tanto, pero el proceso sí que ha sido fascinante.
Conclusión
Corazón de Tinta no va a colarse entre mis lecturas favoritas de 2021, pero te la recomiendo si te gustan los libros de aventuras con juegos metaliterarios, extraer citas que hablen sobre libros y palabras con altas dosis de intensidad y las aventuras sin grandes complicaciones. También te la recomiendo para aprender cómo no deben escribirse diálogos y como hay que dar la información para mantener enganchadas a tus lectoras.
Lanzamiento: 2004
Editorial: Siruela
Traducción: Rosa Pilar Blanco
Páginas: 493
Valoración: Café con leche
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Estoy completamente de acuerdo con tu reseña. Me leí este libro hace años con la misma ilusión y esperanzas que apuntas y me llevé la decepción del siglo. No esperaba la brutalidad de los adultos ni lo poco que se explota la magia que se anuncia. Es un buen libro, pero no continué la saga.
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Fíjate que a mí la brutalidad de los adultos me importa menos que lo anodino y gris que es todo al final. Es lo que tú dices de la escasez de magia. Muy meh.
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